La autogestión ha revivido en los últimos años. Lo ha hecho de la mano de nuevos movimientos sociales dispuestos a forjar su identidad colectiva en torno a un significante con ondas raíces en la cultura obrera. Se logró más allá de las dificultades generadas por un concepto que a partir de los noventa se reconvertía hacia la descentralización promovida por las tecnologías informáticas: las universidades privadas, los bancos, las grandes empresas de servicios invitaban a sus clientes a “autogestionar” sus dudas ingresando a una cuenta por Internet. El resultado es que hoy numerosos colectivos de trabajadores, sobre todo afectados por los mecanismos excluyentes del mercado capitalista, rescatan el término para dar cuenta de una modalidad de organización colectiva de carácter alternativo (...)
Publicado:
2016-09-09